RCP* = Reanimación cardiopulmonar
Comencé a hacer RCP* tratando de calmarme. Cuando se me nubló la vista y cuando una gota de agua se resbaló por mi mejilla me di cuenta de que estaba llorando. Pareció volver a presentar signos vitales, débiles, pero presentes.
Tengo que hacer algo
Me limpié las lágrimas con fiereza y luego la tomé entre mis brazos, para hacer luego lo que debí haber hecho desde que tuve esa visión: Salir de ese lugar.
Había pensado en seguir el río, seguirlo por la orilla… Pero me había parecido arriesgado. Ahora lo único arriesgado era quedarse allí.
La abrigué con extrema delicadeza y tomé las cosas necesarias. La tomé en mis brazos, respiré profundo y me desee suerte a mi mismo.
Comencé a seguir el río confirmando casi cada minuto que ella estuviera respirando y teniendo pulso. Me dirigí hacia la derecha del río y lo seguí algo alejado de la orilla para evitar incidentes.
Una hora más tarde paré a descansar, porque aunque ella no pensara demasiado el trabajo no era fácil.
Por favor, solo la salida
La tomé de nuevo en mis brazos puesto que no había nada que perder. De vez en cuando pronunciaba su nombre para ver si reaccionaba al estímulo o a un movimiento… Pero ella seguía sumida en un sueño.
Otra hora, hora y media, más tarde paré de nuevo. Ya no sabía para donde dirigirme. El río tenía que seguir, el problema es que no sabía hasta donde.
Tomé de nuevo a Daniela deseando caer y entonces despertar en mi cama, a su lado mientras ella respiraba normalmente… Fue entonces cuando encontré con algo: Era una laguna… Una laguna no muy grande…
Pero lo que me permitió respirar no fue la laguna… Fue el pequeño muelle y el pequeño y sencillo barco pescador que vi al otro lado
Gracias
-¡Ayuda!- Grité lo más fuerte que pude- ¡Ayúdenme por favor!
La persona que se encontraba en el pequeño barco, que al parecer era un señor, volteó tratando de encontrar el sonido
-¡Aquí!- Grité de nuevo- ¡Ayuda!
El señor me miró y de inmediato empezó a remar hacia mi dirección. Confirmé que Daniela estuviera respirando de nuevo… Se me hizo eterno el tiempo que tardó el pequeño hombre en llegar hasta donde yo estaba
-¿Qué ha pasado?
-Nos perdimos en un campamento. Ella está muy mal
Puse a Daniela en el barco y luego me subí
-Gracias
El señor me dedicó media sonrisa
-¿A cuanto estamos de un hospital?
-A unos Diez minutos- Respondió el señor mientras remaba
Solo 10 minutos más, pequeña dije mentalmente acariciándole la mejilla
Entonces ella no presentó pulso radial.
No
RCP* de nuevo… Parecía responder, pero era como un juguete, funcionaba cada vez que le jalabas la cuerda, pero una vez se acabara dejaba de funcionar. Tenía que volver a jalar la cuerda antes de que se acabara.
-¿Qué le pasa?- Preguntó el señor mirándola a ella y luego mirando sus piernas…Que para mi desgracia estaban ensangrentadas.
-Está embarazada- Dije dudando de la primera palabra con voz temblorosa
-¿Ha tomado usted cursos de primeros auxilios?- Preguntó el señor seguramente curioso porque yo le hacía reanimación a Daniela
-Soy médico- Respondí yo
El señor me dedicó una mueca de lastima y luego amarro su bote con una pequeña cuerda de un palo que había en el muelle. El me ayudó a sacarla con cuidado y luego nos dirigimos hacia la pequeña cabaña, me indicó que la pusiera en una cama.
Lo escuché hablar por teléfono mientras solicitaba una ambulancia de urgencia.
Me senté al borde de la cama respirando con dificultad y con lágrimas de furia recorriendo mi rostro… Como si fueran a solucionar todo.
La ambulancia tardó menos de lo esperado. La miraba ausente mientras los paramédicos trataban de mantenerla con vida.
Lo que me preocupaba era que no deliraba, no se quejaba, como hacía unos cuatro años… No mostraba signos de estar consciente.
De pronto me empecé a sentir mareado, asqueado, enfermo… Sentí como me iba para un lado
-¡Joven!- Fue lo último que escuché
Comencé a hacer RCP* tratando de calmarme. Cuando se me nubló la vista y cuando una gota de agua se resbaló por mi mejilla me di cuenta de que estaba llorando. Pareció volver a presentar signos vitales, débiles, pero presentes.
Tengo que hacer algo
Me limpié las lágrimas con fiereza y luego la tomé entre mis brazos, para hacer luego lo que debí haber hecho desde que tuve esa visión: Salir de ese lugar.
Había pensado en seguir el río, seguirlo por la orilla… Pero me había parecido arriesgado. Ahora lo único arriesgado era quedarse allí.
La abrigué con extrema delicadeza y tomé las cosas necesarias. La tomé en mis brazos, respiré profundo y me desee suerte a mi mismo.
Comencé a seguir el río confirmando casi cada minuto que ella estuviera respirando y teniendo pulso. Me dirigí hacia la derecha del río y lo seguí algo alejado de la orilla para evitar incidentes.
Una hora más tarde paré a descansar, porque aunque ella no pensara demasiado el trabajo no era fácil.
Por favor, solo la salida
La tomé de nuevo en mis brazos puesto que no había nada que perder. De vez en cuando pronunciaba su nombre para ver si reaccionaba al estímulo o a un movimiento… Pero ella seguía sumida en un sueño.
Otra hora, hora y media, más tarde paré de nuevo. Ya no sabía para donde dirigirme. El río tenía que seguir, el problema es que no sabía hasta donde.
Tomé de nuevo a Daniela deseando caer y entonces despertar en mi cama, a su lado mientras ella respiraba normalmente… Fue entonces cuando encontré con algo: Era una laguna… Una laguna no muy grande…
Pero lo que me permitió respirar no fue la laguna… Fue el pequeño muelle y el pequeño y sencillo barco pescador que vi al otro lado
Gracias
-¡Ayuda!- Grité lo más fuerte que pude- ¡Ayúdenme por favor!
La persona que se encontraba en el pequeño barco, que al parecer era un señor, volteó tratando de encontrar el sonido
-¡Aquí!- Grité de nuevo- ¡Ayuda!
El señor me miró y de inmediato empezó a remar hacia mi dirección. Confirmé que Daniela estuviera respirando de nuevo… Se me hizo eterno el tiempo que tardó el pequeño hombre en llegar hasta donde yo estaba
-¿Qué ha pasado?
-Nos perdimos en un campamento. Ella está muy mal
Puse a Daniela en el barco y luego me subí
-Gracias
El señor me dedicó media sonrisa
-¿A cuanto estamos de un hospital?
-A unos Diez minutos- Respondió el señor mientras remaba
Solo 10 minutos más, pequeña dije mentalmente acariciándole la mejilla
Entonces ella no presentó pulso radial.
No
RCP* de nuevo… Parecía responder, pero era como un juguete, funcionaba cada vez que le jalabas la cuerda, pero una vez se acabara dejaba de funcionar. Tenía que volver a jalar la cuerda antes de que se acabara.
-¿Qué le pasa?- Preguntó el señor mirándola a ella y luego mirando sus piernas…Que para mi desgracia estaban ensangrentadas.
-Está embarazada- Dije dudando de la primera palabra con voz temblorosa
-¿Ha tomado usted cursos de primeros auxilios?- Preguntó el señor seguramente curioso porque yo le hacía reanimación a Daniela
-Soy médico- Respondí yo
El señor me dedicó una mueca de lastima y luego amarro su bote con una pequeña cuerda de un palo que había en el muelle. El me ayudó a sacarla con cuidado y luego nos dirigimos hacia la pequeña cabaña, me indicó que la pusiera en una cama.
Lo escuché hablar por teléfono mientras solicitaba una ambulancia de urgencia.
Me senté al borde de la cama respirando con dificultad y con lágrimas de furia recorriendo mi rostro… Como si fueran a solucionar todo.
La ambulancia tardó menos de lo esperado. La miraba ausente mientras los paramédicos trataban de mantenerla con vida.
Lo que me preocupaba era que no deliraba, no se quejaba, como hacía unos cuatro años… No mostraba signos de estar consciente.
De pronto me empecé a sentir mareado, asqueado, enfermo… Sentí como me iba para un lado
-¡Joven!- Fue lo último que escuché
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No sé que le pasa a la plantilla del blog pero ya no la puedo ver... ¬¬
Sin comentarios en esta entrada .. Ah sii
ME SALTE A GABYY ¿Como pude olvidarme de ti? Si tu comentario nunca falta!! Las amoo y comenten!! Jamas dejen de hacerlo!!
Besos
