Desperté en sus brazos, había dormido como una bebé. Era el día de mi graduación.
Sebas me había dicho que quería que fuéramos a la playa, a nuestro lugar. Haríamos un picnic. Luego de desayunar nos encaminamos y estuvimos ahí en menos de una hora, alrededor de las once
-Me gusta el cielo- Dije mirándolo acostada. Estaba más azul de lo normal y no había ni una nube que tapara el grande y deslumbrante sol.
-A mi también- Dijo el cerca de mi oído, estaba acostado al lado mío- ¿Sabías que hice postre?- Dijo después de un largo rato y se sentó
-Creí que no cocinabas bien
-Excepto postres- Dijo sonriendo y ayudándome a parar. Me senté en la mantita de cuadros mientras él me pasaba la cajita transparente con el postre adentro y el cogía su caja.
-Esta delicioso- Dije luego de probarlo- Debiste haberlo hecho antes
El me miró divertido
-¿Qué pasa?- Lo pensé durante unos segundos- Tu no lo hiciste- Lo acusé
-Pero lo compre- Dijo robándome un beso- Y te tocó el mejor.
Bueno, eso era cierto.
Tomé otro poco del postre, sin duda era de vainilla…No, tenía algo más. Probé otro poco para ver si lo identificaba. Tomé algo más y algo se desprendió del medio del postre. Era plateado y brillante, delicado, en el centró tenía algo aún más brillante. Era un anillo.
Cuando miré a Sebas me dedicó una sonrisa arrebatadora y luego se arrodilló
-¿Te casarías conmigo?
Me tiré a abrazarlo
-¡Claro que sí!
Me miró y luego me besó. Me tumbó encima de la mantita y se puso encima de mí mientras yo me derretía debajo de su mirada.
-Serás la esposa más hermosa- Le sonreí y le di un beso- Y también la mamá más hermosa- Luego se deslizó por mi vientre y me besó.
Sebas me había dicho que quería que fuéramos a la playa, a nuestro lugar. Haríamos un picnic. Luego de desayunar nos encaminamos y estuvimos ahí en menos de una hora, alrededor de las once
-Me gusta el cielo- Dije mirándolo acostada. Estaba más azul de lo normal y no había ni una nube que tapara el grande y deslumbrante sol.
-A mi también- Dijo el cerca de mi oído, estaba acostado al lado mío- ¿Sabías que hice postre?- Dijo después de un largo rato y se sentó
-Creí que no cocinabas bien
-Excepto postres- Dijo sonriendo y ayudándome a parar. Me senté en la mantita de cuadros mientras él me pasaba la cajita transparente con el postre adentro y el cogía su caja.
-Esta delicioso- Dije luego de probarlo- Debiste haberlo hecho antes
El me miró divertido
-¿Qué pasa?- Lo pensé durante unos segundos- Tu no lo hiciste- Lo acusé
-Pero lo compre- Dijo robándome un beso- Y te tocó el mejor.
Bueno, eso era cierto.
Tomé otro poco del postre, sin duda era de vainilla…No, tenía algo más. Probé otro poco para ver si lo identificaba. Tomé algo más y algo se desprendió del medio del postre. Era plateado y brillante, delicado, en el centró tenía algo aún más brillante. Era un anillo.
Cuando miré a Sebas me dedicó una sonrisa arrebatadora y luego se arrodilló
-¿Te casarías conmigo?
Me tiré a abrazarlo
-¡Claro que sí!
Me miró y luego me besó. Me tumbó encima de la mantita y se puso encima de mí mientras yo me derretía debajo de su mirada.
-Serás la esposa más hermosa- Le sonreí y le di un beso- Y también la mamá más hermosa- Luego se deslizó por mi vientre y me besó.
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Todo me conmovía tanto. Mis padres parados esperando a que dijeran mi nombre, mi novio tomando mi mano y haciendo círculos delicadamente, mi mejor amiga haciendo un río con sus lágrimas mirando su diploma una y otra vez…
¡Uy! ¿Ese era mi nombre?
Sebas me jaló la mano y comprendí que había escuchado bien, habían dicho mi nombre completo. Salí en busca de mi diploma y cuando volví a mi lugar estaba empapada en lágrimas.
-Felicidades- Me susurró con voz dulce
Al mirar hacia adelante pude ver que mi mamá también estaba llorando y estiraba su mano y la movía indicándome que estaba allí. Tiramos los sombreros mientras la sensación nos llenaba de orgullo. Ahora…Ahora yo era una médica, y tenía toda mi vida por delante.
-¡Felicidades!- Gritaron mamá, papá y mi hermano abrazándome
-Estoy muy orgullosa- Dijo mamá con voz quebrada- Mira qué grande estás
“tengo 21 años” le quise decir… Pero ella nunca iba a cambiar, para ella… Para ella siempre iba a ser una bebé.
-Felicidades querido- Le dijo a Sebastián
-Gracias- Respondió el sonriendo.
Agradecí que se llevaran de lo mejor.
-¡Felicidades!- Gritó la mamá de Sebas mientras me abrazada
-Gracias señora….
Ella me interrumpió alzando un dedo. Recordé que odiaba que la llamaran señora
-Gracias Claudia- Corregí
-Así está mejor
-Eh…Mamá- Tartamudeé- Ella es Claudia, la mamá de Sebas
-Mucho gusto- Dijo ella abrazándola- Yo me llamo Clara, gusto en conocerte. Tienes un hijo maravilloso
-Ni hablar de la tuya…
Y ahí empezó la larga e incómoda conversación entre madres... Siempre las odié, aunque bueno yo estuve distraída en Sebas… No supe a qué horas la conversación dio un giro tremendo, y luego de hablar de mis travesuras, papá y mamá invitaron a los padres de Sebas a cenar con motivo de nuestra graduación…
Llegamos al restaurante y nos sentamos en la mesa más grande, como siempre yo al lado de Sebas. Agradecí que el tema ya no fuera el típico tema de la historia de los hijos, sino la situación económica del mundo.
-Hey- Escuché la voz de Sebas
-¿Qué?- Pregunté en voz baja sin mirarlo simulando que estaba poniendo atención a la conversación
-Me encanta ese vestido
-A mi también- Dije riendo
-Me refiero a la modelo- Dijo en un susurro
-¿Y dónde está?- Pregunté en voz aún más baja
-Tonta- Respondió el- Te amo- Me dijo al oído y luego me dio un beso en la mejilla
-Pasta en salsa blanca- interrumpió el mesero poniendo mi plato en frente de mí
-Gracias
Repartió el resto de los platos. Luego seguimos con el postre, pero cuando estábamos en la mitad Sebas carraspeó la voz. Me pregunté si iba a hablar
-Aprovechando la ocasión- Dijo con voz más educada de lo normal- Quería aprovechar la situación para decirles algo…- Mi mano empezó a sudar debajo de la suya
¿Qué les iba a decir?¿Acaso les iba a decir que estaba embarazada?
Mi papá lo miró con los ojos bien abiertos
Lo va a matar pensé para mí misma…
Con la mano con que no estaba tomando mi mano sacó algo de su bolsillo. Tomó la cajita entre sus manos y miró a todos mientras cambiaba de color a amarillo
-Yo les quería decir que… Que ella es lo más importante que tengo en mi vida. Que desde que la conocí no hago sino más que sonreír… Que es la chica más maravillosa que conozco… Que la amo tanto que sería capaz de dar mi vida por ella- Dijo con voz quebrada y luego una lágrima se le escapó. Posó su mirada en mí- Y si… Y si están de acuerdo me gustaría casarme con ella.
Mi mamá sonrió, mi papá… No lo pude descifrar. La madre de Sebas parecía emocionada y el papá de Sebas parecía… Informado…
-Si prometes no hacerle daño y ella está de acuerdo… Tienes todo el derecho- Dijo mi papá mirándome fijamente
Las lágrimas empezaron a salir de mis mejillas y Sebas me abrazó. Luego me miró fijamente
-¿Te casarías conmigo?- Dijo abriendo la pequeña cajita. Le sonreí… El era hermoso
-Si- Le dije dándole un beso- Te amo mucho- Dije en voz baja contra su frente.
Cuando volteé a mirar me percaté del espectáculo que estábamos haciendo. Había una chica detrás de nosotros que estaba llorando y la hermana de Sebas nos mirada divertida. Enrojecí.
-¿Porqué lo hiciste?- Le pregunté cuando salimos al estacionamiento
-¿Proponerte matrimonio?
-Dos veces- Dije asintiendo
-Pues porque te amo
Le sonreí
-Sabes a que me refiero
-Pues…Porque así será menos duro cuando se enteren de que tendremos un bebé… Además teníamos que oficializarlo antes de que te arrepintieras
Le sonreí con ganas
-¿Qué pasa?- Preguntó divertido
-Me gusta cómo suena tendremos
El me sonrió
-¿Sabes algo?
-¿Qué?- Respondió intrigado
-Jamás me arrepentiré
-Yo tampoco- Me dijo para luego besarme
Todo me conmovía tanto. Mis padres parados esperando a que dijeran mi nombre, mi novio tomando mi mano y haciendo círculos delicadamente, mi mejor amiga haciendo un río con sus lágrimas mirando su diploma una y otra vez…
¡Uy! ¿Ese era mi nombre?
Sebas me jaló la mano y comprendí que había escuchado bien, habían dicho mi nombre completo. Salí en busca de mi diploma y cuando volví a mi lugar estaba empapada en lágrimas.
-Felicidades- Me susurró con voz dulce
Al mirar hacia adelante pude ver que mi mamá también estaba llorando y estiraba su mano y la movía indicándome que estaba allí. Tiramos los sombreros mientras la sensación nos llenaba de orgullo. Ahora…Ahora yo era una médica, y tenía toda mi vida por delante.
-¡Felicidades!- Gritaron mamá, papá y mi hermano abrazándome
-Estoy muy orgullosa- Dijo mamá con voz quebrada- Mira qué grande estás
“tengo 21 años” le quise decir… Pero ella nunca iba a cambiar, para ella… Para ella siempre iba a ser una bebé.
-Felicidades querido- Le dijo a Sebastián
-Gracias- Respondió el sonriendo.
Agradecí que se llevaran de lo mejor.
-¡Felicidades!- Gritó la mamá de Sebas mientras me abrazada
-Gracias señora….
Ella me interrumpió alzando un dedo. Recordé que odiaba que la llamaran señora
-Gracias Claudia- Corregí
-Así está mejor
-Eh…Mamá- Tartamudeé- Ella es Claudia, la mamá de Sebas
-Mucho gusto- Dijo ella abrazándola- Yo me llamo Clara, gusto en conocerte. Tienes un hijo maravilloso
-Ni hablar de la tuya…
Y ahí empezó la larga e incómoda conversación entre madres... Siempre las odié, aunque bueno yo estuve distraída en Sebas… No supe a qué horas la conversación dio un giro tremendo, y luego de hablar de mis travesuras, papá y mamá invitaron a los padres de Sebas a cenar con motivo de nuestra graduación…
Llegamos al restaurante y nos sentamos en la mesa más grande, como siempre yo al lado de Sebas. Agradecí que el tema ya no fuera el típico tema de la historia de los hijos, sino la situación económica del mundo.
-Hey- Escuché la voz de Sebas
-¿Qué?- Pregunté en voz baja sin mirarlo simulando que estaba poniendo atención a la conversación
-Me encanta ese vestido
-A mi también- Dije riendo
-Me refiero a la modelo- Dijo en un susurro
-¿Y dónde está?- Pregunté en voz aún más baja
-Tonta- Respondió el- Te amo- Me dijo al oído y luego me dio un beso en la mejilla
-Pasta en salsa blanca- interrumpió el mesero poniendo mi plato en frente de mí
-Gracias
Repartió el resto de los platos. Luego seguimos con el postre, pero cuando estábamos en la mitad Sebas carraspeó la voz. Me pregunté si iba a hablar
-Aprovechando la ocasión- Dijo con voz más educada de lo normal- Quería aprovechar la situación para decirles algo…- Mi mano empezó a sudar debajo de la suya
¿Qué les iba a decir?¿Acaso les iba a decir que estaba embarazada?
Mi papá lo miró con los ojos bien abiertos
Lo va a matar pensé para mí misma…
Con la mano con que no estaba tomando mi mano sacó algo de su bolsillo. Tomó la cajita entre sus manos y miró a todos mientras cambiaba de color a amarillo
-Yo les quería decir que… Que ella es lo más importante que tengo en mi vida. Que desde que la conocí no hago sino más que sonreír… Que es la chica más maravillosa que conozco… Que la amo tanto que sería capaz de dar mi vida por ella- Dijo con voz quebrada y luego una lágrima se le escapó. Posó su mirada en mí- Y si… Y si están de acuerdo me gustaría casarme con ella.
Mi mamá sonrió, mi papá… No lo pude descifrar. La madre de Sebas parecía emocionada y el papá de Sebas parecía… Informado…
-Si prometes no hacerle daño y ella está de acuerdo… Tienes todo el derecho- Dijo mi papá mirándome fijamente
Las lágrimas empezaron a salir de mis mejillas y Sebas me abrazó. Luego me miró fijamente
-¿Te casarías conmigo?- Dijo abriendo la pequeña cajita. Le sonreí… El era hermoso
-Si- Le dije dándole un beso- Te amo mucho- Dije en voz baja contra su frente.
Cuando volteé a mirar me percaté del espectáculo que estábamos haciendo. Había una chica detrás de nosotros que estaba llorando y la hermana de Sebas nos mirada divertida. Enrojecí.
-¿Porqué lo hiciste?- Le pregunté cuando salimos al estacionamiento
-¿Proponerte matrimonio?
-Dos veces- Dije asintiendo
-Pues porque te amo
Le sonreí
-Sabes a que me refiero
-Pues…Porque así será menos duro cuando se enteren de que tendremos un bebé… Además teníamos que oficializarlo antes de que te arrepintieras
Le sonreí con ganas
-¿Qué pasa?- Preguntó divertido
-Me gusta cómo suena tendremos
El me sonrió
-¿Sabes algo?
-¿Qué?- Respondió intrigado
-Jamás me arrepentiré
-Yo tampoco- Me dijo para luego besarme
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Les gusto??
A mi si??
Que pasa con mis seguidoras??
Ya no les gusta la historia?? :(
Siento que nadie la lee .. Excepto Liizz por supuesto
Gracias a las que todavía lo leen
